Rocas ígneas o magmáticas

Se forman a partir de la lava de las erupciones volcánicas en la superficie de la Tierra y por el enfriamiento del magma fundido debajo de la corteza terrestre. De esta forma, tenemos las rocas ígneas intrusivas (solidificación del magma en el interior de la Tierra) y las rocas volcánicas o extrusivas (solidifican en el exterior). 

 

El magma es un fundido complejo formado a partir de la fusión de rocas compuestas principalmente por SiO2 (sílice) y distintos cationes como (Al, Ca, Na, K, Fe, Mg,...), gases, agua, minerales sólidos y fragmentos de roca dispersos en la masa fundida. Su temperatura se sitúa entre los 650 y los 1200ºC. 

Así, se establecen varios tipos de magma en función del contenido en sílice:

Tipo de magma SiO2 (%)
Ácido o félsico <65
Intermedio 55-65
Básico o máfico 45-55
Ultrabásico o ultramáfico  >45 

Los magmas ácidos o félsicos están formados por Al y Si, frente a los máficos que están formados por Mg y Fe. Por tanto, no tiene nada que ver con el pH. 

El magma asciende debido a su temperatura y a su estado líquido y que contiene un alto contenido en volátiles y es menos denso que el material circundante. Las presiones tectónicas dirigidas pueden empujarlo.